viernes, 22 de mayo de 2009

Mi vida



Hoy parto entristecido hacia la batalla,
dejo allá a un lado tus besos y caricias,
miro al horizonte y mi corazón estalla,
al hombro mi fusil, ya veo mil tragedias.

Cada noche entre disparos pienso en ti,
no se si algún día te volveré ya a ver,
la esperanza, inunda el alma que te dí,
y mi corazón, más no te puede querer.

En la fría noche anhelo escapar allí a verte,
este guerrero una herida trajo ya de su tierra,
y su herida crece cuando no puede sentirte,
la herida de mi amor, crece aquí en la guerra.

En una nueva batalla, inmerso me hallo,
a mi espada confío mi vida o mi muerte,
la muerte me busca en su negro caballo,
su espada en mi pecho, mi inútil suerte.

Despierto y me veo entre tus brazos,
tus cristalinos ojos lloran mi ausencia,
tu llanto se funde entre mis abrazos,
la muerte por ti me concedió clemencia.

Muerte, cuando vengas para llevártela,
llévame con ella, prepara mi partida,
muerte, cuando vengas para quitármela,
llévame con ella, pues ella, es mi vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario