miércoles, 8 de diciembre de 2010

El fin de mis días







Son las 18:13 de la tarde, una vida esta llegando a su fin, es la mia propia, veo como escapa mi alma de aquel cuerpo inerte, un telón que se cierra, una llama que se apaga y una vida que acaba... Veo gente a mi alrededor pero nadie mira, intento advertirles de que me ire para no regresar, más parece no importales, es la muerte de una vida solitaria. Busco el modo de escapar, de seguir con mi vida, de que mi alma quede en ese cuerpo, aparecen sobre mi cuatro personas desconocidas que me animan a seguir viviendo, que gritan con fuerza ¡DESPIERTA! pero mi mente cree que es tarde que ya no podrá aguantar un minuto más.Y allí me veo yo luchando por vivir, tratando de seguir adelante de volver a introducir mi alma en mi cuerpo pero siento que no puedo... Aquellas personas que luchan por mi consiguen levantarme me siento en mi cuerpo más no puedo moverme, escucho el sonido de una sirena, de gente que me habla, trato de contestar pero soy incapaz de sentir...


Puedo abrir los ojos y veo a las cuatro personas que luchan por mí, oigo como se esfuerzan por hacerme vivir y empiezo a sentir que todo se mueve rápidamente, las sirenas empiezan a perderse en lalejanía, pierdo las cuatro carasque me acompañaban para ver aparecer dos nuevas mientras todo se sigue moviendo, cuando todo vuelve a quedar quieto soy capaz de ver tresluces sobre mí,no soy capaz de ver nada con claridad y mis ojos poco a poco empiezan a cerrarse con suavidad, dentro de la poca nitidez por fin llegué a ver un rostro conocido... eran mis padres con lágrimas en los ojos, mi alma volvía a escapar y de nuevo ví mi cuerpo, se encontraba en un quirófano tumbado en una camilla, mi madre asía una de mis manos,mientras mi padre sujetaba a mi madre.La puerta del quirófano se abre y una persona desconocida para mí hace salir a mis padres, cinco personas más entran en la oscura habitación solo iluminada por los tres focos que enfocan mi cuerpo, tratan de reanimarme de nuevo luchan con fuerza pero ya no hay nada que hacer, he encontrado mi lugar en el paraíso y de allí no me quiero mover, veo como una a una aquellas personas desisten en su empeño por hacerme vivir, yo allí sentado en mi lugar despido a aquellas personas que me regalaron la vida mientras un telón se cierra, una llama se apaga... y mi vida acaba...


1 comentario:

  1. Te digo que me agrada tu poema pero te advierto que ha palabras que están pegadas...

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